Estioquiometria
En química,
la estequiometría
(del griego
στοιχειον, stoicheion, 'elemento' y μετρον, métrón,
'medida') es el cálculo de las relaciones cuantitativas entre los
reactivos y
productos en el transcurso de una reacción
química.1
Estas relaciones se pueden deducir a partir de la teoría
atómica, aunque históricamente se enunciaron sin hacer
referencia a la composición de la materia, según distintas leyes
y principios.
El
primero que enunció los principios de la estequiometría fue
Jeremias
Benjamin Richter (1762-1807), en 1792, quien describió la
estequiometría de la siguiente manera:
En química,
la estequiometría
(del griego
στοιχειον, stoicheion, 'elemento' y μετρον, métrón,
'medida') es el cálculo de las relaciones cuantitativas entre los
reactivos y
productos en el transcurso de una reacción
química.1
Estas relaciones se pueden deducir a partir de la teoría
atómica, aunque históricamente se enunciaron sin hacer
referencia a la composición de la materia, según distintas leyes
y principios.
El
primero que enunció los principios de la estequiometría fue
Jeremias
Benjamin Richter (1762-1807), en 1792, quien describió la
estequiometría de la siguiente manera:
Una reacción
química se produce cuando hay una modificación en la identidad
química de las sustancias intervinientes; esto significa que no
es posible identificar a las mismas sustancias antes y después de
producirse la reacción química, los reactivos
se consumen para dar lugar a los productos.
A escala microscópica una reacción química se
produce por la colisión de las partículas que intervienen ya sean
moléculas,
átomos o iones,
aunque puede producirse también por el choque de algunos átomos o
moléculas con otros tipos de partículas, tales como electrones
o fotones. Este
choque provoca que las uniones que existían previamente entre los
átomos se rompan y se facilite que se formen nuevas uniones. Es
decir que, a escala atómica, es un reordenamiento de los enlaces
entre los átomos que intervienen. Este reordenamiento se produce por
desplazamientos de electrones: unos enlaces se rompen y otros se
forman, sin embargo los átomos implicados no desaparecen, ni se
crean nuevos átomos. Esto es lo que se conoce como ley
de conservación de la masa, e implica los dos principios
siguientes:
- El número total de átomos antes y después de la reacción química no cambia.
- El número de átomos de cada tipo es igual antes y después de la reacción.
En el transcurso de las reacciones químicas las
partículas subatómicas tampoco desaparecen, el número total de
protones,
neutrones y
electrones permanece constante. Y como los protones tienen carga
positiva y los electrones tienen carga negativa, la suma total de
cargas no se modifica. Esto es especialmente importante tenerlo en
cuenta para el caso de los electrones, ya que es posible que durante
el transcurso de una reacción química salten de un átomo a otro o
de una molécula a otra, pero el número total de electrones
permanece constante. Esto que es una consecuencia natural de la ley
de conservación de la masa se denomina ley
de conservación de la carga e implica que:
- La suma total de cargas antes y después de la reacción química permanece constante.
Las relaciones entre las cantidades de reactivos
consumidos y productos formados dependen directamente de estas leyes
de conservación, y por lo tanto pueden ser determinadas por una
ecuación (igualdad
matemática) que las describa. A esta igualdad se le llama
ecuación estequiométrica.